Algunas de las preguntas que se hacen la mayoría de personas es ¿cuál es el propósito de la educación?, ¿Para qué estudiar tanto? también se preguntan los niños y jóvenes, ¿Cuáles son los fines de la educación? se plantean filósofos, pedagogos y autoridades del gobierno. De hecho, pueden haber respuestas para todos los gustos a dichas interrogantes, sin embargo, para establecer un buen modelo educativo y buenos planes educativos a nivel nacional, se hace necesario estar bien enfocados en lo que queremos conseguir, a corto y a largo plazo, a través de la educación. Y aquí les presento algunas ideas que nos puede ser útiles , incluso a los padres y madres de familia.
En lo personal, soy un convencido que algunos de los propósitos de la educación contemporánea es principalmente brindar un bagaje a los jóvenes con los niveles suficientes de dominio de las letras y los números, y dotarles de conocimientos básicos para participar activamente en las complejidades del mundo y la sociedad modernos cuando lleguen a la edad adulta.
Ello constituye una respuesta a las condiciones de la vida moderna, donde las habilidades impartidas en la propia enseñanza de las letras y los números son, a veces, más importantes que la historia y la literatura, pero no más importantes que el contenido de las llamadas ciencias.
Según esto, amigos, las exigencias de la sociedad imponen restricciones a la educación pública de manera que ésta pueda producir jóvenes adultos capaces de asumir un papel activo y fructífero en los ámbitos social y económico.
Dicho de otra manera, uno de los principales propósitos de la educación debería ser forjar la conducta y la conciencia de nuestros niños y jóvenes, a fin de que asuman un papel activo y fructífero en el cambio social y económico de la comunidad en donde vive: Su propio país, si vive en ella; o el país extranjero, si vive fuera.
(véase "El Poder de las Ideas", A.C. Grayling, p.147)
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